Las actividades de juego creativas son esenciales para la vida del niño. A través ellas, el niño asimila valores, adquiere comportamientos, desarrolla diversas áreas del conocimiento, mejora sus habilidades motoras, etc. (Valladores, 2004: 112).
Todos los niños, especialmente los que se encuentran en una situación difícil, tienen la necesidad de expresar, de crear, de establecer relaciones con el mundo. Utilizando la arteterapia es posible beneficiar al niño en estos aspectos, y alejarlo de lo desagradable, del dolor, de la ansiedad, de la monotonía, proporcionando la externalización de impulsos agresivos, miedos y temores, así como la transformación de sus significados. Por otra parte, la arteterapia ayuda a los niños y niñas a ejercer su creatividad de una manera natural.